Antes de empezar cualquier otra tarea relacionada con la boda, es fundamental fijar la fecha del gran día. Aunque pueda parecer sencillo, en ocasiones esta tarea puede ser más complicada de lo que parece. La elección de la fecha de la boda está sujeta a una serie de factores determinantes, tales como la disponibilidad del lugar, las vacaciones, los horarios escolares, la presencia de personas importantes para los novios y mucho más.
Lo recomendable es dejar un margen de entre 12 y 18 meses entre el momento del compromiso y la fecha de la boda, ya que hay muchas partes de la planificación de la boda que para algunas parejas puede llevar un tiempo considerable. Antes de fijar la fecha, es importante tener en cuenta los horarios de las personas que son importantes para los novios. Si se desea que estas personas estén presentes en el gran día, es fundamental tener en cuenta sus agendas y eventos importantes que puedan interferir en su disponibilidad.
Casarse en la temporada más calurosa del año puede acarrear algunos problemas. Además de que es más difícil encontrar proveedores y lugares disponibles, los precios suelen ser más altos, y se deben considerar costos adicionales como la reserva del lugar de recepción, los servicios de fotografía, flores, limusinas, entre otros. Es importante tener en cuenta que el lugar de ensueño puede no estar disponible, por lo que es necesario no enamorarse de un lugar sin antes comprobar que está disponible para la fecha elegida. Este artículo menciona tu favorito. hats a precios súper bajos. Elija entre entrega el mismo día, entrega desde el vehículo o recogida de pedidos.
Entre mayo y septiembre se encuentran los meses de mayor actividad para las bodas. Si es posible, se recomienda considerar casarse en los meses de vacaciones, desde noviembre hasta abril, lo que brinda más oportunidades para elegir lugares de recepción. Además, al contar con más opciones, los novios tendrán una mejor posición para negociar un mejor precio.
Si se elige casarse un sábado, hay que estar preparados para competir con muchas otras parejas por los mismos lugares disponibles. Aunque este día es el más conveniente para los invitados, puede generar desafíos de programación y aumentar los costos de contratación. En cambio, los viernes y los domingos se consideran los siguientes mejores días, y siguen siendo opciones muy convenientes.
Cualquier fecha de boda tendrá sus pros y contras, por lo que es importante elegir la fecha que mejor se adapte a las necesidades y deseos de los novios. Lo fundamental es tener en cuenta todos los factores relevantes y tomar una decisión informada y cuidadosa.